miércoles, 28 de enero de 2015

Pues llevo mucho sin escribir, demasiado quizás. Pero siempre decía que al día siguiente sin falta, y parece ser que el día siguiente por fin es hoy. No quiero escribir acerca de nada en concreto, simplemente de todo en general. Últimamente ha salido mucha gente de mi vida, aunque en realidad no se hayan ido del todo porque les llevo bien dentro. Pero también ha entrado gente nueva, sin la cual no me imagino a día de hoy. ¿Y qué pasa con los que permanecen? Pues que esa gente que permanece, después de varios años, esa gente es la importante. Aunque esto no es lo principal, lo principal es que la vida me ha dado varios golpes, pero aquí sigo, a pie de cañón y sin ningunas ganas de abandonar. Porque vivir es divertido,  quién sabe como me irá de aquí a unos meses, pero no me importaría que no cambiara nada en absoluto de mi vida actual. Tengo una familia a la que adoro, unos amigos sin los cuales no sería yo y gente que me alegra los días.
Porque esta niñata, infantil, enfadica, paranoica, rayada, pesadilla o similares tiene algo claro en la vida, y es que nunca nunca se debe parar de soñar, de reír, de disfrutar de la vida a sorbitos pequeños...

O qué narices, a mordiscos.